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Con emoción y compromiso se recordó a los Fusilados de Soca en la ruta que los homenajea

22 de Diciembre, 2025

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Durante el mediodía del sábado 20 de diciembre, en una jornada marcada por altas temperaturas, se realizó un nuevo homenaje a los Fusilados de Soca en el Camino de los Fusilados (ex Ruta 70), a unos 300 metros de la Ruta 9.

La actividad convocó a una importante cantidad de público, entre familiares, organizaciones de derechos humanos, representantes institucionales, vecinos y vecinas de la zona, y se desarrolló frente al memorial que recuerda a las víctimas del crimen ocurrido el 20 de diciembre de 1974.

El acto fue organizado de forma conjunta por la Comisión por la Memoria de los Fusilados de Soca, CRYSOL, la Comisión Nacional Honoraria de Sitios de Memoria y el Gobierno de Canelones y formó parte de una instancia que se realiza de manera ininterrumpida desde el año 2008, con el objetivo de mantener viva la memoria, promover la verdad y reafirmar el reclamo de justicia.

Este nuevo homenaje tuvo lugar al cumplirse 51 años de los fusilamientos y se inscribió además en un contexto conmemorativo más amplio, vinculado a los 50 años del inicio del Plan Cóndor, coordinación represiva entre las dictaduras del Cono Sur en cuyos inicios se enmarca este crimen.

Durante el encuentro se desarrollaron intervenciones públicas de representantes de las organizaciones convocantes y de autoridades departamentales, que generaron momentos de altísima emoción, sobre todo cuando fueron mencionados los nombres de las cinco personas que fueron brutalmente asesinadas: Héctor Daniel Brum, Graciela Estefanell, Floreal García, Mirtha Hernández y María de los Ángeles Corbo, quien al momento de su ejecución se encontraba embarazada.

Compromiso institucional

El secretario general del Gobierno de Canelones, Pedro Irigoin, en su oratoria dejó un mensaje de compromiso institucional, transmitiendo el saludo del intendente Legnani y recordando la voluntad planteada desde la propia asunción en el mes de julio pasado de seguir buscando la verdad. “Hasta el último centímetro del batallón lo vamos a remover”, dijo el jerarca, quien aseguró que se continuará trabajando para “la permanencia y la conservación” de cada sitio de memoria de todo el departamento. “Vamos a invertir recursos, tiempo y mucho, mucho corazón, para que las cosas sigan sucediendo”, aseguró, para finalmente enfatizar que “la verdad la queremos toda”.

El director de Derechos Humanos, Carlos Garolla, destacó la relevancia simbólica e histórica del lugar en el que se realizó el homenaje, señalando que el Camino de los Fusilados de Soca es “la primera ruta que lleva el nombre de un acontecimiento vinculado al terrorismo de Estado”.

En ese marco, subrayó la importancia de sostener año a año este acto como una “peregrinación por la memoria, la verdad y la justicia”, al tiempo que remarcó el compromiso del gobierno departamental con las políticas de derechos humanos y memoria reciente. Garolla recordó que el Gobierno de Canelones fue el primero del país en contar con una Dirección de Derechos Humanos y mencionó el desarrollo de circuitos y sitios de memoria en todo el departamento, así como el apoyo a las excavaciones en el Batallón 14.

Por su parte, José Olivera, integrante de la Comisión por la Memoria de los Fusilados de Soca, remarcó el valor de haber sido uno de los primeros memoriales impulsados en el país cuando la temática tenía mucha menos visibilidad. Olivera explicó que el objetivo central ha sido siempre “desarrollar la memoria, obtener la verdad y que se establezca justicia”, y repasó el largo camino recorrido para lograr avances judiciales en torno a este crimen, enmarcado en la coordinación represiva entre Uruguay y Argentina.

En tanto, desde la agrupación CRYSOL - Asociación de Ex Presos Políticos, Nélida “Chela” Fontora reafirmó el compromiso histórico de la organización con la memoria, la verdad y la justicia, al tiempo que subrayó el trabajo conjunto desarrollado con el Gobierno de Canelones a lo largo de distintas administraciones. Fontora sostuvo que, pese a algunos avances judiciales, “todavía no se sabe toda la verdad de lo que ha pasado con los fusilados de Soca”, y remarcó la necesidad de continuar investigando responsabilidades.

Los Fusilados de Soca

En el punto exacto en el que se desarrolla año a año este emotivo encuentro, fueron asesinadas cinco personas el día 20 de diciembre de 1974, en el marco del terrorismo de Estado. Héctor Daniel Brum, Graciela Marta Estefanell, Floreal García Larrosa, Mirtha Yolanda Hernández y María de los Ángeles Corbo de Brum habían sido secuestrados en Buenos Aires el 8 de noviembre de ese mismo año y trasladadas de forma clandestina a Uruguay, en el contexto de la coordinación represiva conocida como Plan Cóndor. 

El asesinato fue presentado públicamente como consecuencia de un supuesto enfrentamiento, versión que luego fue desmentida. María de los Ángeles Corbo de Brum se encontraba embarazada de seis meses al momento de su ejecución. Es por ese motivo que el grupo “familiares”, considera que fueron seis y no cinco las personas asesinadas en esa ocasión. En el operativo también fue secuestrado Amaral García, hijo del matrimonio García-Hernández, quien fue apropiado por una familia vinculada a fuerzas represivas argentinas, pero que años después pudo recuperar su verdadera identidad.

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