El Complejo Cultural Politeama – Teatro Atahualpa del Cioppo fue el escenario para recibir a los participantes y ganadores del concurso literario Canelones cuenta con voz, dirigido a personas mayores de 60 años de todo el departamento. La convocatoria se lanzó a mitad de este año y participaron 41 personas de todos los rincones del departamento de Canelones, lo que dio como resultado seis relatos ganadores y varias menciones especiales.

De la actividad participó el Intendente de Canelones, Yamandú Orsi, el Secretario General del Gobierno de Canelones, Francisco Legnani, el Pro Secretario General, Agustín Mazzini, la Directora General de Desarrollo Humano, Gabriela Garrido, el Director General de Cultura, Sergio Machín, y el Responsable del Área del Adulto Mayor, Darwin Barreto.

La Directora General de Desarrollo Humano explicó que este encuentro intentó poner sobre la mesa la importancia del Día del Adulto Mayor en el mundo y en el departamento de Canelones en particular. “Es un orgullo poder llegar a envejecer, es un orgullo haber hecho un montón de cosas en la vida y poder volcárselo a otros”, afirmó Garrido, y añadió que este encentro tuvo un significado muy importante, ya que fue reencontrarse con escribir, con relatar, con contar un cuento que, después, va a ser relatado a otras generaciones en las escuelas, a los niños y a las niñas.

Por su parte, el Director General de Cultura dijo que la dirección participó en este proyecto colectivo ocupando varios roles y agradeció a las funcionarias y funcionarios que trabajaron para que esto pudiera concretarse.

Los relatos ganadores y la experiencia de quienes los escribieron

El Intendente de Canelones, Yamandú Orsi, fue el encargado de entregar los premios a los seis adultos mayores ganadores: Daniel Parada, con su cuento El bosque en blanco y negro; Eden Correia, con su cuento Mi primer libro; Luisa Consiglio, con su relato Una tanita; María Julia Lemes, quien escribió ¿De dónde vienen las tormentas?; Marisa Soca, autora de El bosque encantado, y Susana Brusco, con Unas vacaciones diferentes.

Daniel Parada tiene 67 años, es médico jubilado, vive en Ciudad de la Costa y dijo que escribe porque le gusta transmitir lo que siente y lo que piensa. Su cuento, El bosque en blanco y negro, busca abordar, desde una mirada infantil, con animales personificados con nombres indígenas, la problemática de la discriminación y la reivindicación de los habitantes primitivos de Latinoamérica. “Uno siempre piensa que es ahí donde más puede trabajarse esa temática. A los adultos nos cuesta mucho cambiar la cabeza; los gurises nos enseñan más a nosotros que nosotros a ellos”, manifestó, y añadió que “es la gente joven la que tiene que impulsar el país y lo que podemos hacer nosotros es contarles nuestra experiencia o, a lo sumo, si se nos pide, emitir algún consejo o transmitir alguna experiencia que hayamos vivido. Creo que somos como la memoria y no aspiro a ser más que eso”.

En tanto, el cuento Una tanita (o Piccolina, en su idioma original), escrito por Luisa Consiglio de 73 años y residente de Sauce desde su niñez, cuando vino desde su Italia natal, describe la realidad de una niña que vivía al otro lado del Atlántico y que emigró con su familia a Uruguay. “Es un cuento real porque es mi historia, entonces fue fácil poder armarlo”, aseguró Consiglio, y contó que, al escribirlo, su objetivo fue tratar el tema de la migración, poder relatar las diferentes formas de vida, costumbres y su niñez en ambos países, Italia y Uruguay. Sobre el concurso, Consiglio expresó que es muy importante que se generen este tipo de espacios para que “la gente grande pueda demostrar que tiene capacidades, tiene habilidades y, sobre todo, pueda transmitir a los niños, y a cualquier edad, sus experiencias y vivencias”.

¿De dónde vienen las tormentas? fue escrito por María Julia Lemes, maestra jubilada de 70 años, residente de 18 de Mayo, y consiste en un diálogo entre un abuelo y su nieta, quien, al avecinarse una gran tormenta, pregunta muy inquieta de dónde es que vienen las tormentas. Es así que el abuelo, a través de paralelismos con la vida real, efectivamente le responde la pregunta y la niña le dice que, luego de esa explicación, ya no le tendrá miedo a las tormentas.

“Escribo desde que tengo memoria”, dijo Lemes, pero aseguró que nunca se había animado a participar de ningún concurso e integrando la Red del Adulto Mayor surgió el impulso para hacerlo. Además, la autora opinó que espacios como Canelones cuenta con voz son sumamente importantes “porque no podemos dejar de lado lo que las personas mayores podemos brindarle a los adolescentes y a los más chicos. Muchas veces, se nos segrega en esos estadíos de edad y no valoramos la riqueza que uno, como mayor, puede brindar a los más chicos y los chicos a nosotros. Ese ida y vuelta es fantástico”.