La 43ª edición de la Criolla Internacional del Parque Roosevelt dejó nueva  huella en la celebración de las tradiciones criollas del país. Durante cinco días, desde el miércoles 27 hasta el domingo 31 de marzo, el evento atrajo a miles de visitantes quienes vivieron la cultura y el esplendor del campo uruguayo en un entorno metropolitano.

Entre otras actividades, se instaló un enorme domo central con artesanías e interesantes actividades culturales y recreativas, con stands de productores, mujeres rurales y emprendedores canarios. El Director del Parque Roosevelt, Arq. José Freitas, lo destacó como uno de los aspectos más innovadores que permitió la amplia participación de emprendedores locales quienes exhibieron sus productos y artesanías.

La estructura del domo proporcionó un ambiente confortable permitiendo un flujo constante y espacioso para las personas. Tanto expositores como visitantes se mostraron satisfechos con las facilidades que el lugar ofreció, como protección contra el clima y la posibilidad de mostrar sus productos. La variedad y accesibilidad de la oferta se destacaron como puntos fuertes, haciendo del evento una excelente ocasión para el disfrute familiar y con amigos.

Objetivos cumplidos

Tal como estaba previsto, la seguridad y el bienestar animal fueron prioridades durante toda la celebración. Las autoridades del evento reafirmaron este año el compromiso ya asumido de garantizar el cuidado de los caballos participantes en las jineteadas.

Una vez más el destino de los fondos recaudados es social y se utilizarán para financiar proyectos comunitarios como la remodelación de escuelas y policlínicas.

Finalmente, el presidente de la organización y miembro del Club de Leones Shangrilá, Jaime Bandeira, subrayó el impacto positivo que el evento tiene en la comunidad. Este genera cientos de puestos de trabajo directos e indirectos y fortalece los lazos sociales en el proceso. Además, destacó que todo lo recaudado durante esta fiesta es volcado a la sociedad.