A partir de la articulación con los municipios, y a través de los espacios de participación ciudadana, el Gobierno de Canelones continúa consolidando el Sistema de Limpieza Pública y Gestión de Residuos. En este sentido, y en el marco del programa Hogares Sustentables, se entregaron en la localidad de Salinas 70 composteras con lombrices para que los residuos orgánicos crudos, sin químicos y sin procesar se transformen en compost.

Con el fin de evitar la generación de basura, la Intendencia promueve a través de diferentes acciones la recuperación y revalorización de materiales, para una adecuada gestión de los residuos orgánicos domiciliarios. De esta forma, se ha logrado que en términos de reciclaje Canelones sea el departamento que más recupera en el país.

Se entregaron composteras en el Municipio de Salinas

Se realizó la entrega de composteras a 70 familias como primera experiencia en la localidad. Los vecinos y las vecinas recibieron un sencillo taller explicativo sobre cómo compostar y se irá acompañando su proceso hasta hacer extensiva la experiencia a todos los barrios del municipio. Así, se ofrece a la población una alternativa para gestionar sus residuos orgánicos, que hoy representan alrededor del 45 % de la basura que produce una familia.

La idea es que el compost domiciliario que se produzca sea utilizado por los vecinos en su propio terreno o que se pueda trasladar el material a las huertas comunitarias que existen en su zona. La compostera puede compostar cáscaras, restos de frutas y verduras sin cocinar, yerba, té, café y residuos de jardinería como hojas, pasto y ramas trituradas. Quienes estén interesados en obtener información sobre cómo compostar pueden visitar la guía que la Intendencia ha puesto a disposición de la población.

Pequeñas y grandes acciones

El compostaje domiciliario no es la única estrategia que lleva adelante el Gobierno de Canelones en esta materia. En Pando funciona una planta de compostaje de residuos sólidos orgánicos que procesa unas 600 toneladas de lodos papeleros producidos por la empresa Softys Uruguay y 200 toneladas de restos de poda y jardinería recolectados por la Intendencia. Se trata de una industria que genera compost que luego es utilizado como cobertura y cierre de celdas de operación en el propio sitio de disposición final de residuos. Además, los productores rurales de la zona pueden utilizarlo para potenciar las propiedades del suelo, con el fin de contribuir y promover, a su vez, la economía circular en Canelones.